Tras terminar su actuación, Kōsei se encuentra con Hiroko Seto, distinguida pianista y amiga de su madre fallecida. Se publican los resultados del concurso. Kaori recibe una invitación para actuar en la gala musical de Towa.
Kōsei comienza su actuación. Al principio todo va bien pero, como las anteriores veces, comienza a dejar de escuchar el sonido de su propio piano. El público comienza a murmurar y sus amigos le miran con preocupación.
Tras bajarse del escenario, Emi se dirige hacia Kōsei, pero se queda sin palabras y no es capaz de decirle nada. Llega el momento de la actuación de Kōsei, quien tendrá que enfrentarse a los fantasmas de su pasado.
Durante los dos últimos años, Takeshi ha estado practicando mucho aspirando a llegar a la cima. Emi perdió la motivación tras la marcha de Kōsei, pero la recupera al verlo en la competición. Ambos realizan una magnífica actuación.
Kōsei se desmaya en clase y se lo llevan a la enfermería, donde recibe la visita de Kaori. Llega el día de la competición, donde se encontrará con dos antiguos rivales del pasado, Takeshi y Emi. Kōsei tiene miedo de no ser capaz de tocar.
Kaori inscribe a Kōsei en una competición y él se pone a practicar con el piano todos los días. Tsubaki se siente excluida ante el acercamiento entre Kaori y Kōsei, pero tras lesionarse en un partido, Kōsei le presta todo su apoyo.
Kōsei y Kaori son descalificados de la competición. Tras la actuación, ella acaba siendo hospitalizada. Kaori no sólo no le hace ningún tipo de reproche a Kōsei, sino que incluso le anima a participar en una competición de piano.
Kōsei y Kaori tocan en los preliminares. Kaori se entrega en alma y cuerpo a la música. En cuanto a Kōsei, cuanto más se concentra en la música más disminuye su capacidad de oír las teclas. Ambos acaban por dejar de tocar.
Kōsei se encuentra con Kaori por la calle y deciden ir a una cafetería. Allí, ante la insistencia de Kaori, toca el piano pero no puede oír el sonido de las teclas. Ella le propone que toque el acompañamiento en su próxima competición.
La Brigada SOS es invitada a participar en un torneo de béisbol y se enfrenta a un oponente formidable armada únicamente con su optimismo. Pero, de repente, el bate de Nagato comienza a obrar un milagro que tienen muy poco de humano.
Haruhi va de mal en peor. Kyon se acuesta como de costumbre, pero cuando se despierta, ¡se encuentra en un espacio sellado a solas con Haruhi! ¿Serán capaces de regresar a la realidad o se quedarán atrapados ahí para siempre?
Haruhi y los otros buscan a la desaparecida Asakura, pero al no hallar ninguna pista, Haruhi regresa a casa sin decir una palabra. Cuando Kyon llega a casa, allí le está esperando Koizumi, que para su sorpresa le lleva a un espacio sellado.
Kyon no puede creer lo que está pasando cuando Asakura, la delegada de clase, trata de asesinarle y Nagato consigue salvarle en el último momento. Y para acabar de rematar su incredulidad, ante él aparece una versión adulta de Mikuru.
Para sorpresa de Kyon, Yuki asegura ser una extraterrestre, Mikuru revela que es una viajera del tiempo y Koizumi dice ser un esper. Y por si no fuera bastante, todos ellos están convencidos de que Haruhi puede alterar la realidad a su antojo.
¡Haruhi está desatada! Primero usa a Mikuru para robar un ordenador y luego la obliga a repartir flyers con ella vestidas de conejitas sexys. Kyon lo observa atónito, pero eso no es nada comparado con la extraordinaria confesión de Yuki.
Por un lado está Kyon que trata de llevar una vida normal en el instituto y por otro la extraña y melancólica Haruhi. Al final, ambos se conocen y forman la Brigada SOS, cuya misión es hacer del mundo un lugar más sorprendente.
Han pasado 30 años desde la aparición de los Burnish, una raza de seres mutantes capaces de controlar el fuego que desataron una gran tormenta de llamas que devastó la mitad del mundo. Cuando aparece un grupo de mutantes aún más agresivos conocidos como Mad Burnish, lo único que se interpone entre ellos y la destrucción total es Burning Rescue, una brigada de bomberos de élite anti-Burnish fundada por Kray Foresight, el gobernador de la República de Promepolis. Precisamente su miembro más novato, el apasionado Galo Thymos, es capaz de capturar a Lio Fiota, la líder de los Mad Burnish. Sin embargo, Lio escapa y al seguirla hasta su escondite, Galo descubre una impactante verdad acerca de los Burnish y la existencia de un terrible plan a escala global…
Sora y Shiro caen derrotados frente al abrumador poder de Izuna, pero los hermanos aún se guardan un as en la manga en la forma de Steph.
Tras recuperar la compostura, Shiro y Sora, con la ayuda de Jibril, se enfrentan a Izuna en un juego de polis y ladrones en el que parece imposible ganar.
Nada más salir del Gran Laberinto de Orcus, Hajime y Yue encuentran a una chica conejo que les pide que salven a su familia. Finalmente, deciden aceptar su petición a cambio de una pista sobre la ubicación del siguiente Gran Laberinto.