Cómo los crímenes más mortales se resuelven gracias a los testigos que nunca mienten: las cámaras de seguridad
Cómo los crímenes más mortales se resuelven gracias a los testigos que nunca mienten: las cámaras de seguridad
Cómo los crímenes más mortales se resuelven gracias a los testigos que nunca mienten: las cámaras de seguridad
Cómo los crímenes más mortales se resuelven gracias a los testigos que nunca mienten: las cámaras de seguridad
Cómo los crímenes más mortales se resuelven gracias a los testigos que nunca mienten: las cámaras de seguridad
Cómo los crímenes más mortales se resuelven gracias a los testigos que nunca mienten: las cámaras de seguridad
Cómo los crímenes más mortales se resuelven gracias a los testigos que nunca mienten: las cámaras de seguridad
Cómo los crímenes más mortales se resuelven gracias a los testigos que nunca mienten: las cámaras de seguridad
Jeffrey Dahmer tiene su primera comida caníbal. Descubre que lo que más le gusta es el bíceps.
El segundo asesinato de Dahmer se oculta introduciendo un cadáver en una maleta por el vestíbulo de un hotel.
Otra víctima escapa, esta vez desnuda, drogada y sangrando. Testigos preocupados llaman al 911.
Jeffrey Dahmer tiene su primera comida caníbal. Descubre que lo que más le gusta es el bíceps.
El segundo asesinato de Dahmer se oculta introduciendo un cadáver en una maleta por el vestíbulo de un hotel.
De un niño a los inicios de un asesino en serie, son las raíces de la historia de Jeffrey Dahmer.
Bundy asesina brutalmente a cuatro mujeres de una hermandad en el campus de la Universidad Estatal de Florida.
Bundy es detenido. Las pruebas son limitadas y Bundy hace creer a la opinión pública que es inocente.
A las pocas semanas de que Bundy se mude a Salt Lake City, comienza una nueva serie de asesinatos.
Desencadenado por el rechazo de una novia, Ted Bundy acaba con la vida de diez mujeres.
Cuando el enamoramiento de Nicole por Freddie se convierte en obsesión, una pelea se vuelve violenta.
Los fantasmas del pasado de Liz y los demonios de su adicción se mezclan y acaban en un ataque sangriento.